“Chito”, como es conocido y querido por todos, posee una virtud fuera de lo común: su obra obedece a patrones arquitectónicos de una coherencia tal, que atraviesa los estratos del tiempo -desde sus obras primeras hasta las más recientes- con una coherencia de principios inusitada; las palabras “tendencia”, “moda” o “estilo”, parecen no existir en su vocabulario edilicio, que es capaz de dar identidad propia a cada proyecto, a la vez que les unifica en un flujo encadenado por sus propios principios compositivos, estéticos, arquitectónicos. A esto debemos el título de esta obra, que no es exageración: La coherencia de una arquitectura permanente; tal es su obra, y tal pretendimos evidenciar en estas páginas, fundamentalmente dedicadas a una obra residencial de fina factura y altísima eficiencia. Sean bloques, torres de apartamentos o villas vacacionales en los litorales lúdicos de la isla, Chito ofrece un itinerario de clara diafanidad y elegantísima lectura.
Esto es verdaderamente inusual; en un mestiere que se caracteriza globalmente por la influencia de autores de gran calado y que parece cambiar de “ismo” con la veleidad de un improvisado analfabeto, esta linea sutilmente continua, que el lector podrá entreleer del volumen, obedece a una madurez profesional y a una enorme certeza en sus postulados compositivos y tectónicos. No solamente sus procesos se obedecen a si mismos, sino que aparentan no tener clara vinculación con los ensayos y novedades de un catálogo más presente en las redes sociales, debido a los posteos del Instagram, Facebook y los sitios de internet de incontables plataformas de los medios de comunicación, que cada vez más acercan las recientes realizaciones de arquitectos y diseñadores de todo el planeta, diluyendo incluso las fronteras entre las obras del Tercer Mundo con las altamente tecnológicas de la vanguardia mundial.
La orquestación volumétrica, si bien libre, tiende a una simetría compositiva que reparte los espacios con la debida jerarquía y el correcto dimensionamiento; la presencia de espacios centrales de gran dimensión, articulados a bloques de dormitorios y áreas de servicio es un esquema frecuente que asienta poderosamente la arquitectura en sus elocuentes solares, y dirige la vista con sensibilidad e intimidad al mismo tiempo. Hay también en esta obra una marcada sensibilidad ante el paisaje que potencia las cualidades del sitio, transformándolo, a través de la arquitectura, en lugares significativamente experienciales. Se trata de una obra de una constante exploración de potencialidades que, a través de un ejercicio magistral del arte, se hacen existir.
Como decíamos al inicio, ya son 12 ejemplares de la serie Pro_File y seguimos contando. Para nosotros en el equipo editorial el trabajo con Chito ha sido una experiencia de aprendizaje acerca de una manera certera de hacer que además es orgánica, no impuesta; Chito es así. Su manera de trabajar se ha reflejado en cada etapa de la realización de este volumen. Todas las actividades de la producción se realizaron de manera sencilla con la misma coherencia y fluidez con la que Chito ha llevado su vida y la obra que en este libro hemos querido celebrar.